👉 Hacé revisar una vez al año los artefactos de gas por un gasista matriculado, preferentemente cuando bajan las temperaturas.
👉 Colocá rejillas de ventilación permanentes. Son obligatorias para todo artefacto de cámara abierta.
👉 La llama del gas siempre tiene que ser azul. Si es amarilla, anaranjada o roja tu artefacto de gas está funcionando mal.
👉 Chequeá siempre que los conductos de evacuación de gases no estén rotos o tengan obstrucciones.
👉 Llamá siempre a un gasista matriculado para que revise los artefactos de gas y las ventilaciones de tu hogar.
👉 Las hornallas y los hornos no son para calefaccionar. Eso es peligroso.
👉 Si tenés un detector de monóxido de carbono, activalo siempre.
👉 Mantené las hornallas de la cocina limpias de líquidos y alimentos porque eso obstruye los quemadores y genera una mala combustión.
👉 Aprovechá al máximo la capacidad calórica de los artefactos, no los tapés con cortinas ni muebles.
👉 Los artefactos de gas instalados en baños o dormitorios sólo deben ser de tiro balanceado.
👉Dejá siempre una rendija abierta; es importante que haya circulación libre de aire desde el exterior.
👉Si vas a habitar una vivienda que ha permanecido cerrada por mucho tiempo, hacé revisar las instalaciones internas por un gasista matriculado.